Cómo revisar el nivel de aceite de la caja de cambios

La transmisión de tu vehículo juega un papel importante en todos tus trayectos diarios. Sin embargo, muchas personas no le dan mantenimiento a este vital componente hasta que surge algún problema.

Revisar el nivel y el estado del líquido de transmisión es una de las tareas de mantenimiento más simples que puedes llevar a cabo para garantizar el rendimiento de tu auto. Aunque muchos propietarios comprenden la importancia de revisar el aceite del motor, el líquido para la transmisión suele pasarse por alto, lo que después puede traer problemas y reparaciones costosas.

Ya sea que tengas poco tiempo conduciendo o que te encanten los autos, conocer dónde se encuentra el nivel de aceite de la caja de cambios y saber cómo revisar el líquido de transmisión es una habilidad útil que puede ahorrarte tiempo, dinero y la molestia de tener que dejar el auto en el taller. Sigue leyendo y descubre qué es lo que puedes hacer para darle mantenimiento a tu transmisión.

Revisión de la condición y del nivel de aceite de la caja de cambios

Antes de revisar el líquido de la transmisión, asegúrate de que el auto esté estacionado en un lugar plano. En la mayoría de los casos, se recomienda arrancar el motor y dejarlo prendido un rato porque el líquido caliente y circulante proporciona una lectura más precisa.

Sin embargo, aunque el proceso general de revisión no varía mucho, debes consultar el manual del propietario para llevar a cabo una revisión más precisa para tu vehículo.

Ubica la bayoneta

La mayoría de los autos, especialmente los de origen estadounidense, tienen una bayoneta para revisar el líquido de la transmisión. Por lo general, tiene colores brillantes y se encuentra en la parte delantera o trasera de la bahía del motor.

Sin embargo, antes de profundizar en ella, recuerda que muchos autos nuevos tienen transmisiones selladas que no cuentan con ningún indicador; es decir, la transmisión incluye un líquido vitalicio que no necesita cambiarse.

Algunas transmisiones automáticas cuentan con tapones separados para drenar, llenar el líquido y revisar su nivel. En ese caso, debes hacer todo el proceso con el motor apagado. A menudo están en transmisiones selladas y no tienen marcas especiales. La accesibilidad suele ser muy limitada, por lo que se recomienda que un experto en transmisiones lo haga.

Por lo general, las transmisiones manuales no tienen bayonetas, pero aún puedes revisar el nivel de líquido. En algunos modelos, puedes hacerlo desenroscando la tapa de la transmisión que se encuentra en la bahía del motor y revisando el nivel con un desatornillador o una varilla metálica. En otros autos, hay un perno específico que indica el nivel adecuado, lo que significa que puedes llenar la transmisión a través de ese orificio hasta que esté lo suficientemente lleno.

En algunos casos, revisar el nivel del líquido de la transmisión puede ser complicado. Si tienes dudas, habla con tu mecánico de confianza.

Revisión de líquido de transmisión

Si la transmisión de tu auto tiene una bayoneta, sácala lentamente y limpia el líquido con una toalla de papel blanca. La toalla se empapará, revelará su verdadero color y te indicará su condición actual:

• Rojo brillante u oscuro: El líquido aún está en buenas condiciones. Cuanto más brillante sea el color, mejor será su condición.
• Marrón o negro: El líquido está contaminado y debes cambiarlo. Cuanto más oscuro sea el color, más contaminado está el líquido.
• Lechoso: Cuando el líquido de la transmisión se mezcla con anticongelante o agua, se vuelve rosa claro y lechoso, lo que significa que necesitas reparar la transmisión.

Algunos líquidos nuevos pueden ser de color amarillo o marrón claro, así que también huele el líquido. Si hay algún problema con la transmisión o el líquido es demasiado viejo, suele oler a quemado.

Luego, tendrás que leer la bayoneta de la transmisión. Vuelve a colocar la bayoneta y sácala nuevamente para leer el nivel de líquido.

La mayoría de las bayonetas tienen espacios con las marcas COLD (FRÍO) y HOT (CALIENTE). Cuando tu motor alcanza la temperatura óptima, el nivel de líquido debe estar dentro de HOT. Leer correctamente el nivel del aceite puede ser difícil si el líquido está limpio y nuevo debido a su transparencia.

Rellenar el depósito

Si descubres que tu transmisión necesita aceite, debes rellenarla con la cantidad faltante. Por lo general, puedes llenar el depósito con un embudo por la ranura de la bayoneta o usar otro punto de llenado si se menciona algún otro en el manual.

Una de las cosas más importantes que debes tener en cuenta es no llenar el depósito por completo.

Demasiado líquido en la transmisión aumentará la presión y dañará los sellos y los empaques. Drenar el líquido puede ser bastante difícil, así que rellénalo sin prisas, revisando el nivel para no pasarte.

Señales de falta de líquido de transmisión

La falta de líquido de la transmisión puede significar dos cosas: 1) necesitas agregar más líquido o 2) puede ser una señal de advertencia de posibles daños en la transmisión.

Abordar el problema lo antes posible es esencial para garantizar la longevidad de la transmisión. Sin embargo, para poder notar posibles problemas, primero debes conocer las señales:

• Fugas en la transmisión. Por lo general, los charcos de líquido rojo debajo del vehículo significan que hay fugas en la transmisión. Sin embargo, es posible que no solo se esté goteando el líquido de la transmisión y tengas que llevar tu auto con un mecánico.
• Transmisión lenta. Una transmisión no puede funcionar correctamente si tiene poco líquido; por lo tanto, es posible que notes que los cambios son más lentos y bruscos.
• Ruidos inusuales. La falta de líquido de transmisión puede provocar sonidos extraños, lo que a menudo significa daños irreversibles.
• Olor a quemado. Debido a la falta de lubricación, la transmisión puede comenzar a sobrecalentarse y generar un olor a quemado.
• Engranes que patinan. Muchas transmisiones tienen placas de embrague que son controladas por la presión del líquido. Cuando no hay suficiente líquido en la transmisión, la presión puede disminuir y los engranes comienzan a patinar.
• Luces de advertencia en el tablero. La luz de check engine o de la transmisión aparece cuando la transmisión tiene poco líquido. Algunas computadoras detectan que no hay suficiente líquido, mientras que otras solo detectan que la transmisión no funciona correctamente.

Revisa el líquido de la transmisión o lleva tu auto a revisión tan pronto como veas alguna de estas señales.

Dependiendo del modelo, reconstruir una transmisión automática cuesta hasta $30,000, por lo que es mucho más económico revisarla con frecuencia y verificar que haya suficiente líquido en el depósito.

¿Cambiar el líquido de la transmisión puede causar daños?

Algunos conductores han compartido sus aterradoras experiencias de cambiar el líquido y arruinar la transmisión de su vehículo. Aunque parezca que lo inventaron, muchas veces la transmisión puede comenzar a patinar después de cambiar el líquido. ¿Por qué sucede?

En primer lugar, un líquido de transmisión nuevo no puede dañar la transmisión. Sin embargo, ya que tiene una mejor capacidad de lubricación, los discos de embrague desgastados pueden comenzar a patinar después de cambiar el líquido.

Los líquidos de transmisión viejos suelen tener partículas abrasivas que aumentan la fricción y crean un mejor agarre entre las placas de embrague, pero también más fricción entre otros elementos de la transmisión.

Por lo general, este problema ocurre en autos con alto kilometraje a los que no se les ha cambiado el líquido de transmisión durante mucho tiempo. Puedes evitar este problema cambiando el líquido de la transmisión cada 100,000 a 150,000 km (consulta el manual del propietario de tu vehículo para conocer el kilometraje ideal).